viernes, 1 de octubre de 2010

Silencios que hieren



El silencio mata.

El silencio es una fuente de poder.

Con él, le decimos sin decir: "Yo soy más fuerte que tú"... ""Más poderoso"...
"No eres digno de mis pensamientos y mucho menos de mis adoradas palabras"

A veces callamos para no herir. Otras, por timidez o por miedo a qué pensarán de mí...
Pero las más, lo hacemos cuando deseamos deshacernos de alguien que ya no nos interesa pero no nos atrevermos a decírselo abiertamente y sin ambigüedades.

¿Por no hacerle daño?
O quizás ¿por cobardía?

Sea como fuere optamos por callar para no tener que enfrentarnos a nuestra realidad.
A la dureza que supone decirle a una persona "me aburres"
"No te soporto ya..."
Máxime cuando ella es totalmente inconsciente de ello,
Cuando en realidad, el último día que hablasteis te despediste con un beso...

Pero algunas amistades son tan frágiles,
Que cuando llega alguien nuevo a nuestra vida despreciamos y tiramos a la basura lo que teníamos cuando nadie nos escuchaba,
Cuando nos arrancaban una sonrisa en nuestros peores momentos...
¿Y cómo hacerlo?

En silencio.

Sin decir adios.

Sin un beso.

Porque yo, soy más digno que tú.

Leonor